Es nuestro tercer campamento de este ciclo iniciado en el 2015. Las Danzas de Paz Universal, como practica transformativa, han penetrado nuestro ser y nuestra vida.

Su efectividad para reconectarnos, energizarnos, llenarnos de gozo y crecimiento ha sido comprobada.

Ahora estamos listos para tomarnos de la mano con el linaje ancestral y la cadena de almas iluminadas y maestros a la que pertenece esta practica. Haremos una siembra en un lugar mas profundo de nuestro ser , de una cepa de una vid milenaria, que posibilitara mas adelante fermentar un vino que calmara la sed de nuestra alma y su aspiración básica.